Diario Reflexivo: Sarah J.Maas y sus contradicciones

Hola lectores espero que estén bien, hace mucho no traemos una entrada para Diario Literario por falta de buenos temas para tocar. Pero, mientras leía mi actual lectura, Imperio de Tormenta, caí en una realidad con la autora Sarah J Maas. Para quienes no han leído Trono de Cristal y Acotar creo que no sería recomendable leer la entrada puesto que posiblemente habrá spoiler. Para los que los han leído pueden continuar leyendo.

Empezare diciendo que mientras leía una escena de Imperio de Tormenta fue revelado ante mí los micromachismos que Sarah mete en sus libros y los trata de disfrazar bajo la fantasía. Me explico, en esta escena Rowan (que como sabemos y para los que no saben él es un hada) acababa de tener sexo con Aelin y fueron a reunirse con sus amigos y Rowan dice esto de aquí:

“…Rowan controló la rabia que sintió al ver a los otros machos cerca de su reina, recordó que eran sus amigos pero…”

Y mi reacción fue esta de aquí:

Y en cierto punto uno puede decir “está bien, es un Hada es normal que se comporte así de posesivo” ¿pero realmente es algo normal? Pienso que me está metiendo a los machos controladores, prepotentes y machistas camuflajeandolo con el hecho de que como son personajes hadas todo está bien. Y pienso que pierde la fuerza todo su otro argumento de que sus personajes femeninos son fuertes, independiente y maravillosas porque al final del día le aguantan estas cosas a sus compañeros solo porque son hadas. Lo mismo pasó con Feyre y Rhysand luego de tener sexo (ACOMAF), las hormonas de él estaban tan descontroladas que siquiera podían dirigirle la palabra a Feyre porque él ya iba a partir caras y patear culos. Otro ejemplo de macho sin control sexual es cuando Feyre se encuentra a Tamlin en el pasillo el dia de la ceremonia (ACOTAR) y Tamlin esta sediento por tener sexo, al otro día se le regaña a esta por haber salido y provocado este intercambio sexual. Yo no sé ustedes, pero todo esto me lleva a pensar que lo que realmente está pasando en la mente de Sarah es una contradicción de pie a cabeza. No me puedes decir que ningún personaje femenino necesita un hombre a su lado y luego ponerle a todas una pareja y en muchos casos, forzada. Pierde fuerza el argumento y queda francamente mal, no todos los hombres tienen porque ser así de controladores y no todos deben terminar con parejas para encontrar su felicidad y encontrase a ellos mismos. A lo largo de estas dos sagas han salido muchos personajes que son capaces de estar perfectamente solos pero la autora se empeña en meterle una pareja a cada uno de ellos sin importar si la profundización, la química y la historia pega con el resto del contenido. No le veo el sentido a todo esto, de verdad, mucho menos cuando en ambos de sus libros el feminismo es algo presente.

Y ojo cuidado con todas esas personas que están pensando en comentarme que Sarah es una buena autora, que ella fomenta cosas buenas y que solo soy una hater. Antes de ponerse a escribir sandeces como locos cabe mencionar que Trono de Cristal es de mis sagas favoritas y lo seguirá siendo, pero no por eso hay que ponerse una venda en los ojos para evitar ver las imperfecciones que hay en sus libros. De eso se trata ser un lector objetivo. 

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Y hasta aquí llega mi entrada de Diario Literario, solo quería sacar todo esto de mi sistema y no encontré mejor oportunidad que esta para traerles una entrada diferente y con un poco de salseo. Déjenme sus pensares en los comentarios pero por favor, que todo sea con respeto. Los leo♥